23 de marzo de 2009

La Linea 2ª Parte

Suavidad.

Algunas líneas son más flexibles que otras, o de otra manera, se les puede doblar más facilmente. En general, una líne suave resulta ventajosa debido a que es más fácil de lanzar y producen movimientos más realista en los señuelos. Por otro lado las líneas "tiesas" o duras tienden a presentar mucho más memoria (ver adelante) y entorpecer el movimiento de señuelos ligeros, son causa de chicoteo en la puntas de la caña, sobre todo en las acción lenta, reducen la distancia de lanzado, además de otros efectos indeseables. Por otro lado, una línea demasiado suave, por lo regular seá también demasiado elástica, presentado los problemas mencionado en el apartado anterior.

Memoria

Al almacenar una línea en una bobina o carrete, ésta tiende a adoptar una forma cilíndrica, el problema radica en que algunas líneas retienen la forma de espiras durante mucho tiempo después de haber sido lanzada. La memoria es pues, el fenómeno por el cual el sedal "recuerda" la forma cilíndrica del carrete o bobina en donde se la guarda. Todas los sedales de monofilamento presentan memoria en mayor o menor medida, por lo que siempre será importante seleccionar una línea que presente la menor cantidad posible de memoria.

Como se mencionío arriba, generalmente la memoria es directamente proporcional con la suavidad de la línea.

Cuanta más memoria presente la lína, mayores serán los problemas que cause, como los nefastos "nidos", poco control sobre la acción de los señuelos, fallas durante el enganche, mayor probabilidad de atorarse en piedras y ramas sumergidas, reduce considerablemente la sensibilidad y una serie más de problemas.

Resistencia a los nudos.

Otra de las principales causas del fracaso durante la pesca, la constituyen los nudos defectuosos, mal apretados o simplemente a que el sedal que estamos usando no es muy resistente a los nudos: es decir, presenta poca resistencia a la COMPRESIÓN LATERAL.

Estudiando la foto ampliada de un nudo simple que se muestra a la derecha (foto 1), podemos deducir que si jalamos de los extremos de la línea, el nudo irá "ahorcando" al sedal, hasta que éste se corte a si mismo.




Este efecto, se produce también cuando hacemos un nudo para sujetar el anzuelo o señuelo. Ver la foto 2.
También podemos decir que un sedal demasiado duro, se "resistirá" a cerrar perfectamente un nudo, lo que posiblemente provocará que dicho nudo se desbarate durante la pelea con el pez




La foto 3, abajo , muestra un degarre sobre un tramo de monofilamento aumentado 16 veces y aunque no se pueda creer, este daño puede pasar desapercibido a simple vista, aunque se puede sentir si se pasan los dedos sobre el tramo. Un daño como el mostrado, puede disminuir la resistencia del sedal hasta en un 50%, ya que en estos puntos, se dan fuertes concentraciones de fuerzas.


Durante la práctica de la pesca, el sedal se ve sometido a esfuerzos y daños al rozar contra las guías de la caña, sobre todo en las guías de jade viejas o que han sufrido microfracturas por golpes; durante los lanzamientos, a la hora de friccionar contra piedras o ramas sumergidas, etc.
Y es la punta del sedal la parte más expuesta a daños, por la acción de dientes, escamas y otras partes duras de los peces capturados: De hecho se sabe que ciertas especies, utilizan la cola para tratar de romper el sedal.

Finalmente, y una vez más, las líneas suaves son más resistentes a la abrasión que las duras, porque las primeras son más flexibles y elásticas.

Más adelante, platicaremos un poco sobre como minimizar los efectos de la abrasión sobre las líneas.

1 comentarios:

Poler! dijo...

Insisto !
andando jajaja