24 de marzo de 2009

La Linea 3ª Parte

Color

Este tema, es causa de cierto debate pues para algunos tiene una importancia vital, mientras que para otros no lo es tanto. Los colores más comunes son el transparente, azul, verde, gris y café en una gran gama de tonos y existen sedales con colores alternantes.

El hecho es que en ciertas condiciones, el color del sedal puede influir en su visibilidad bajo el agua, por lo que muchos pescadores procuran utilizar sedales de un color similar al del agua que están pescando.
En mi modo de pensar, el color no es un factor determinante para adquirir una línea.

Para terminar con esta sección mencionaremos otro factor de cierta importancia en la calidad de las líneas y se trata de su resistencia a los rayos utravioleta. Nunca es mala idea adquirir una línea tratada para soportar este tipo de daños.

Los factores que influyen en el daño de las líneas.

La lista de estos factores, incluye los siguientes:

- Ojillo del anzuelo en mal estado
- Luz Solar
- Nudos accidentales
- Impactos y/o compresión
- Calor
- Agua
- Torceduras
- Enrollado inadecuado en el carrete
- Partes del carrete gastados o dañados.
- Nudos flojos o incorrectamente atados.

Ojillos dañados

Durante los años 70 del siglo pasado (si, ya estamos en el siglo XXI), la fábrica Berkley realizó una serie de pruebas al respecto que indican que cuando se ata un nudo sobre un ojillo dañado, ya sea por fricción, fractura, o desgaste por oxidación, el sedal se expone a la abrasión en mayor o menor importancia según sea la rugosidad que presente la superficie afectada que en casos EXTREMOS puede llegar a disminuir hasta el 50% de la resistencia nominal de la línea. Un caso extremo, y de hecho relativamente frecuente, se presenta en los anzuelos cromados de baja calidad. El cromado de este tipo de anzuelos, se va desquebrajando con el tiempo hasta que se fractura, dejando astillas y bordes tan afilados como navajas que en mal momento pueden causar pequeños cortes al sedal.
Los revistimientos de cadmio y de ciertos barnices también se llegan a quebrar y dejas esquirlas y fragmentos cortantes.


Luz solar

Como se sabe la luz solar esta compuesta, en parte, de dañinos rayos ultravioleta que causan el cáncer cutáneo. Estos rayos afectan a los polímeros con los que se fabrican los sedales, haciédolos quebradizos al causar una especie de cristalización de las moléculas que forman el material. Como es inevitable durante la pesca dejar de exponerse uno mismo y nuestro equipo a la luz solar, hay que tratar de minimizar la exposición innecesaria del las lóneas (y todo el equipo) evitando dejarlos expuestos cuando no se les está utilizando. De todas maneras, consideremos sustituir los sedales de monofilamento despues de tres o cuatro temporadas o incluso un poco más a menudo si fuera necesario.

Nudos accidentales

A ningún pescador, pese a que lo niegue, de vez en cuando se le hacen nudos accidentales, llamados "nudos de aire", y que de no ser eliminado, disminuye la resistencia del sedal, como ya se mencioó, hasta en un 50%. Lo mejor es cortar la línea debajo del nudo, a menos de que dicho nudo no se haya apretado demasiado y que podamos deshacerlo sin necesidad de agujas, dientes o uñas. :)

Impactos o compresión

Estos dos tipo de percances, causan debilitamiento de la línea en la zona afectada, al adelgazar o deformar el perfil y/o causar abrasiones severas. Algunos de estos daños son imperceptibles a la vista. El tacto es un auxiliar para detectar estas fallas y cortar la línea para elimimar el segmento afectado es la mejor solución.

Calor

El calor al que se exponen las líneas, deteriora lentamente la estructura del material polimérico del monofilamento.

Agua

Como mencionamos, el monofilamento no es totalmente impermeable y con el tiempo va absorbiendo agua, con la subsecuente merma en la resistencia nominal del sedal.

Torceduras

Durante la pesca con cañas de spinning o baitcast, los señuelos mal balanceados producen severas torceduras en la línea, especialmente durante la pesca de arrastre (troling). Por otro lado, los carretes con altas relaciones de enrollamiento, por ejemplo un carrete con relación de recuperación 5:1, produce 5 torceduras por cada vuelta que se da a la manivela. Las torceduras facilitan la formación de "nidos", dificultan el lanzamiento y aumentan la fricción (léase abrasión) contra las guías.

Enrollado inadecuado

Llenar apropiadamente la bobina del carrete, permite lanzamientos más suaves y precisos, esto es que el carrete debe llenarse casi hasta la orilla de la bobina y evitar el sobrellenado: con un carrete medio lleno, el lanzamiento se ve empobrecido por la fricción excesiva de la línea con el borde del carrete y un carrete sobrellenado propiciará que la línea excedente salga en aros que seguramente terminarán en un bonito nido.

Partes gastadas o dañadas del carrete y la caña

Según algunas estadísticas, si se excluyen los daños causados a las líneas por los mismos peces y por los roces contra objetos, las averías e imperfecciones de las partes del carrete y de la caña que tienen contacto directo la línea, son las que más líneas desahucian.

Los carretes de spinning y los de bobina cubierta (o de botón) de baja calidad son los tipos de carretes que debido a su diseño causan más daños por abrasión a las líneas: las agujas recuperadorass, sobre todo aquellas que no están embaladas se desgastan paulativamente hasta formarse canales en donde la línea se atora.

Nudos defectuosos

Cuando un nudo se desata, invariablemente daña a la línea en mayor o menor medida. Volver a utilizar ese segmento, además de evidenciar tacañería, es arriesgar demasiado.

Para terminar por ahora Muchas Gracias a Héctor Yamasaki por su valioso aporte a esta seccion...

1 comentarios:

Poler! dijo...

Venga de la teoria a la Practica!

andando!